lunes, 23 de julio de 2018

1156


Aquel curioso anciano lleva un año muerto –
Echamos de menos su sombrero tan fijo –
Su lámpara, ya marchita, se apagó
durante una tarde luminosa y rígida –

¿Quién extrañará su anticuado mechero –
hay algún resplandor para él?
¿Espera alguna perseverante esposa
su arrugado regreso a casa?

Vida que inicias en fluyente sangre
y te consumas con fastidio,
al contemplarte la realización personal
se siente efímera y fría.





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