lunes, 30 de julio de 2018

1212


Mi victoria duró hasta que los tambores
dejaron en soledad a los muertos.
Entonces dejé caer mi triunfo,
purifiqué mi estola junto al lugar
donde los rostros difuntos
se volvieron, al final, hacia mí.
Y odié a la gloria.
Y ellos desearon ser como yo.

Aquello que es ser puede describirse mejor
también cuando ha sido –
Puedo predecir un sabor de perspectiva.
La tiranía de los seres humanos
era más blanda – más divina
en su camino a lo transitivo.
Con los muertos un arrepentimiento de bayoneta
es nada.



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