¿Has visto cuando sueltan globos?
Ascienden con tal elegancia –
que es como si los cisnes
te premiaran por deberes de diamante –
Sus patas líquidas salen con suavidad
sobre un mar cristalino –
Los globos desprecian al aire, como si fuera
excesivamente común para criaturas
tan distinguidas como ellos –
Sus cintas se encuentran justo más allá de la
vista –
Algunos – luchan – por conservar el aliento –
no querrían una repetición de la – muerte –
Y sin embargo, abajo, la multitud aplaude –
Entonces la criatura dorada queda tensa –
y gira – Luego tropieza frenética contra un
árbol –
sus venas imperiales se abren y desgarran –
y se desploma en el mar –
La multitud – se retira con perjurios –
las cenizas descienden – a las calles –
y los empleados en sus oficinas
comentan – “era solo un globo” –
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