martes, 26 de enero de 2016

132



Recién me había perdido cuando fui salvada.
Recién había oído que el mundo avanzaba.
Estaba recién aprovisionada para el ataque
con eternidad cuando el aliento retornó –
y al otro lado
escuché retroceder a la decepcionada marea.

Por tanto, me siento como la que regresa.
Extraños secretos por contar de la Línea del Ecuador.
Como marinero que bordea nuevas playas.
Como pálida reportera desde las terribles puertas
delante del sello.

Después, tiempo para quedarme.
Después, tiempo para ver las cosas
inauditas –
inescrutadas.
Después tiempo para demorarme
mientras pasan los años –
Pesados, lentos caminan los siglos

No hay comentarios:

Publicar un comentario