miércoles, 13 de enero de 2016

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Un nido para cada pájaro –
¿Por qué cierto reyezuelo va buscando
en tímida búsqueda –

por qué cuando las ramas son libres
el peregrino halla hogares
en cada árbol?

Quizá una casa muy alta –
ah, aristocracia –
desea el pequeño reyezuelo –

quizá su orgullo aspira –
a una ramita fina,
a una ramita incluso supremamente fina –

La alondra no está avergonzada
por construir en la tierra
su modesta casa –

No obstante, ¿quién entre todo el tropel
que danza alrededor del sol
se regocija tanto? 

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