viernes, 1 de enero de 2016

36



Si yo muriera –
Y tú vivieras –
Y el tiempo continuara fluyendo –
Y la mañana brillara –
Y el mediodía ardiera –
como ha solido hacer –
Si los pájaros edificaran como antes
y las abejas fueran tan activas como alguna vez lo fueron –
¡Uno podría alejarse cuando quisiera
de las empresas de este mundo terreno!
Es grato saber que habrá provisiones
cuando durmamos con las margaritas –
que el comercio seguirá –
y los negocios volarán con la velocidad de siempre –
¡Tranquiliza la partida,
mantiene serena el alma –
que caballeros tan entusiastas
dirijan la plácida escena!

2 comentarios:

  1. Me encanta y me hace transitar por la verdadera poesía.

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  2. Nos agrada inmensamente que la poesía de Emily Dickinson la haya conmovido. Muchas gracias por su lectura.

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